Eran sus últimos días y deberían acumular méritos y "arrobas" (1 arroba = 11,50 kgs. Un buen cebón = 20 arrobas) para alcanzar la "gloria" de verse coronados en su momento sobre los varales y el humo de la cocina. El otoño era dueño y señor y marcaba el norte de los días y de las noches.
El otoño, encumbrado sobre las copas de los fresnos, les despojaba de las últimas hojas amarillas. Los prados, con los colores ocres y pardos. Los pellizos, vacíos de castañas, y los ánimos, subidos de tono, porque todo eso se interpretaba bajo el signo de LAS MATANZAS.
(-¿Cuándo matamos los cochinos? - preguntaban los rapaces impacientes a sus padres - Cuando se caigan todas las hojas de los fresnos... respondían los padres convencidos...).
Y así llegó San Martino: con la despensa vacía, los cochinos dispuestos, resignados y con las arrobas bien prietas y las hojas de los fresnos alfombrando la hierba de los prados. Todo a punto. (Señorita, que mañana no vengo a la escuela, porque voy a la matanza de mi tía...)
- Hágame caso, buen hombre, coja esta guindilla y unte con ella el culo del jumento, que ya verá usté.
Así lo hizo nuestro buen paisano. Tan pronto como le aplicó el remedio, el burro partió como un rayo, echando humo y fuego, dando rebuznos de socorro y coces al viento.
- Y ahora ¿qué hago yo, si no voy a poder darle alcance? - se quejó angustiado nuestro ilustre paisano
- Pues haga usté lo propio - le contestó el de las guindillas.
No hubo más que aplicarse de la misma guisa el ungüento y arrancó como una centella, de tal manera que no sólo le dio alcance al burro de fuego, sino que le pasó y en el momento de adelantarle le dijo bufando: en ca la Rapina te espero...)
Parece que pesa el santo...(véase al devoto porteador de la izquierda)
Deslavada, desvaída e insulsa la feria de este año. El tiempo lo hizo todo. Pocos puestos de venta y un ambiente pobre.
¡Pobre!... Más pobre aún la procesión. ¡Vamos, hombre! No llegaban a las dos docenas los "procesionarios" = (los que iban en la procesión, se entiende) (IVA incluido. IVA = el cura, los monaguillos, las autoridades, el gaitero con el del tambotil y la pareja de la guardia civil)
El cielo plomizo, amenazando lluvia.