Este año éramos 34. Batiendo records de participación. Caminata desde Rionegro. Los más jóvenes delante, abriendo el camino, abriendo los surcos del futuro. Jóvenes valientes, decididos, que había que "arrequedarlos" (miraré en el diccionario de Eusebio para ver si está la palabra). Y otro joven más, con los 80 bien cumplidos y... dando ejemplo; él también en la cabecera de la marcha, ¡¡mucho Felicísimo!!
Parada y abrevadero (de agua, no más que agua...) en Villar.
Descanso y bocata a las orillas del embalde de "La Agavanzal"
Disfrutamos del paisaje, de la brisa que riza el azul del agua... Y nos sorprende tanta maravilla, tantos regalos que la madre Naturaleza dispone a nuestros pies tan cerca, a la puerta misma de nuestras casas...
Orilla del río Tera, abajo de la presa del embalse. Espesa y frondosa la ribera y... fresca. Se agradece la frescura. Ribera convertida en jungla. Merece la pena el camino, merece la belleza salvaje de este tramo del camino.
Llegada triunfal a las puertas del santuario de La Agavanzal.
LA COMIDA.-
El pequeño Oyan nos da la bienvenida... |
Adelante... pasen y acomódense...
Otro record más, 45 a la mesa.