viernes, 9 de septiembre de 2022

UN AGOSTO FELIZ




Me daréis la razón si digo que este año hemos disfrutado de uno de esos agostos o de esas vacaciones, que pal caso es lo mismo, que uno espera como si le fuera en ello la vida. Esos días, más o menos planificados, y que  te salen redondos, tal y como figuraban en el programa. Oyes los comentarios de la gente, que lo atestiguan: -
"Esa comida hay que repetirla..."; "- ¡Qué lástima!, lo que más me gustó de todo, el museo de Zamora, y apenas nos dio tiempo a ver todo...; ¡Ay qué ganicas tenía de volver a salir por ahí, dar un garbeo y conocer cosas..., que parece que no, pero, mira, esto nos une más y parece como si creciera la amistad, no me digas que eso es poca cosa. Yo pienso que esto vale mucho y que hay que conservarlo porque experiencias como la de hoy no las tenemos todos los días y ¿sabes qué te digo?, que hay que guardarlo como si fuera oro molido.


Bajaba el botijo, cual Celedón venido del cielo, dispuesto al brindis, en son de paz y de buena voluntad. Y de paz y de buen rollo habló el pregonero Mikel..., y es que aquí, queridos míos, no se puede vivir y disfrutar si no es  con esa actitud.

Se celebran las fiestas o festejos de agosto o, puede que sea más exacto, hablar de semana cultural, si cabe incluir como hecho cultural la tradición gastronómica.

Si suena la gaita y responde el tamboril es buena señal de fiesta. Hacen buena pareja los dos Chemas o José Maris. Se lo toman a modo de profesionales y les salen las cosas bien. Por tanto, les agradecemos su dedicación y esfuerzo.

Y hubo quienes (
gente grande y gente más chica) que se pasó toda la tarde pegados a las cazuelas para preparar con todo el mimo y el esmero posible sus pintxos de concurso.


Y los cantores llenaron el aire con los sones de la tierra. El himno del pueblo ("Valleluengo unido, las alas abiertas...) Un cariño que flota y que se conserva suspendido de esos hilillos de nubes que embarañan la atmósfera, cuajando el ambiente de nostalgias.




Definitivamente, una semana cultural, para que esté bien sabrosa, debe satisfacer suficientemente los apetitos y sabores de la tierra. Y claro que la gastronomía es cultura, que hay que celebrar y conservar. (Pero no sólo en la olla, que ahí, a veces, se estropea...)
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LOS PROTAGONISTAS: LOS NIÑOS

Alain, 22 meses. 
Merece estar en primera línea, porque
se ha constituido en el miembro más joven
de la Asociación "Amigos de San Blas"
¡¡B I E N V E N I D O!!


Los monitores estuvieron a la altura, como si hubieran estado tratando con niños toda la vida..  ¡Enhorabuena!, chavales.

Yo creo que los niños han quedado contentos y esa es la mejor herramienta para medir el grado de satisfacción sobre las actividades realizadas.

(LAS FOTOS HAN SIDO REALIZADAS POR JOSÉ Mª GARCÍA -DE SALDAÑA-, FERNANDO MARTÍNEZ -DE VALLELUENGO-, HERMINIA FERRERO, DE VALLELUENGO.)


Y PARA OTRO AÑO MÁS

ENHORABUENA A TODOS LOS PARTICIPANTES, A LOS NIÑOS Y NIÑAS. POR SUPUESTO. A LOS PADRES Y MADRES, QUE HAN ECHADO EL RESTO PARA QUE TODO SALIERA BIEN. LO HAN CONSEGUIDO.
ENHORABUENA A LOS/AS ORGANBIZADORES, A LOS/AS MONITORES Y A TODOS LOS QUE ECHARON UNA MANO. UNA PRUEBA MÁS DE QUE ESTO FUNCIONA PARTIENDO DE LA BUENA VOLUNTAD Y DEL BUEN ROLLO ENTRE TODOS.



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