sábado, 5 de enero de 2013

VIII.- LA BATALLA DEL AGUA

Sólo el aire que respiras siente la vida,
que el tomillo y la retama justifican
y los rayos de ese sol, hechos de plomo,
adormecen a esta tierra 
como a  un viejo venerable.
..................................................
Tierra, que en letras de oro nos muestras
tus andaduras, tus miserias,
 tus cadenas,
tus caminos doloridos, tu paciencia
...y tus silencios.

José Fuente, 1974 (agosto)

Foto José: Fuente de la iglesia (el agua no es potable
 porque hay filtraciones de aguas sucias desde el alcantarillado).
EL AGUA

Después de la manifestación parecía como si se hubieran abierto todas las puertas, como si, una vez vareado el árbol, cayeran todas las nueces sin necesidad de más esfuerzos. Pero, sí, sí. Tuvimos que luchar a brazo partido. El asunto del agua (agua corriente y alcantarillado) se las trajo, fue una de las batallas más duras y complicadas. En la Diputación Provincial no estaban dispuestos a perdonar. La campaña que el pueblo puso en marcha, la manifestación y, sobre todo, la movida en los medios de comunicación (cadena SER, el Norte de Castilla y la TV regional) hicieron pupa en las posaderas de nuestros muy amados y entrañables representantes públicos y ellos no estaban dispuestos a perdonar. De ahí las pequeñas mezquindades y venganzas. Ahora lo explico.

Foto José. El primer pozo de captación de aguas, frente
a la torre de la iglesia.
Veamos: Los Planes Provinciales (programa anual de la Diputación para sufragar las obras solicitadas por los ayuntamientos) dividen la provincia en tres zonas o planes: Oeste, Campos y Base. Cada una de estas zonas tiene establecida una cuota de participación distinta (me refiero a lo que le toca pagar al ayuntamiento o a los vecinos por cada obra concedida). Por ejemplo: la zona Oeste, en la que está incluido Valleluengo, debía aportar el 12 % y la zona Campos el 33 %. Resulta que a los pocos días de la manifestación (¡qué casualidad!)  nos informan de la Diputación que se han concedido 2.000.000 de ptas para el abastecimiento de agua y saneamiento, pero con la condición de que se acepte la inclusión de esa partida en el plan Campos, lo que supone una aportación municipal del 33 %, es decir, de 660.000 ptas. (primera venganza). El pueblo no lo acepta y, a partir de aquí, se suceden las visitas estériles a Zamora por parte de las distintas comisiones que el pueblo enviaba (21-08-1979: Máximo Mateos (alcalde mayor), Santiago Pérez (secretario), Ismael Alonso (alcalde pedáneo), Ismael Bernardo, Ana María Gallego, Bernardino Junquera, Julián Felipe, José Fuente. 13-10-1979: Rafael Gallego, Ismael Bernardo, Ana María Gallego, Bernardino Junquera, José Fuente. Hay otras más que no tengo registradas, pero que se repitieron, sobre todo con el equipo técnico de la Diputación, con el ingeniero, el Sr. Arranz, con el que tuvimos que torear muy de cerca, pero que se mostró mucho más comprensivo y cercano que todos los demás).

Foto José. Depósito del agua en la Raya. Desde ahí se
distribuye el agua para todo el pueblo.
Reclamábamos que se nos incluyera en el plan Oeste, con lo que nos tocaría pagar el 12 %, es decir, 240.000 ptas., pero no hubo tu tía, o lo tomas o lo dejas... No tuvimos más remedio que tragar y nos quedamos con lo que nos dieron. Se suponía que esas 660.000 ptas. deberían salir del bolsillo del Ayuntamiento, pero aquí dijeron que nones, que estaban sin blanca, porque ese Ayuntamiento estaba exento de cobrar impuestos a los vecinos, con lo cual tampoco tenía ingresos (no nos lo creímos, porque se llenaban la boca hablando por todas las esquinas de superávit. El caso es que tuvimos que pencar y a regañadientes tirar "pa lante".  Fue la segunda venganza). Tocó escotar entre los vecinos, a tanto por enganche o toma de agua: 56 solicitantes, a 11.785 ptas cada uno. 

Al año siguiente, 1980, cayeron otros 3.000.000 de ptas, aplicados a la segunda fase de las aguas. A continuación se instaló el teléfono público, fue asfaltado el camino vecinal (desde Las Fontaninas, antes era un camino de tierra). Después llegó el alumbrado público (en dos fases, años 1982-1983), se pavimentó la calle de la Poza de Abajo (desde el Fornico hasta las escuelas viejas). 

En conclusión: Mereció la pena el esfuerzo. Gracias a la tenacidad y a la lucha de todos (¡de la mayoría!) lo conseguimos. De una tacada, en un plazo mínimo de tiempo, conquistamos los derechos que se les negaban al pueblo. Claro, la Diputación y otras instituciones, también el Ayuntamiento (y también algunos vecinos del pueblo), no podían reconocer mérito alguno por parte del pueblo y se dedicaron en cuerpo y alma a desprestigiar y a jugar a dividir (el viejo juego del divide y vencerás), (tercera venganza, cargada de mala uva y de mezquindades. Acordaos de las actuaciones de los guardias de Mombuey, apostados a la espera en la salida de la carretera de Rionegro hacia el pueblo o las patrullas que hacían por las calles del pueblo, cumpliendo las órdenes que les llegaban de arriba -de Zamora-. O... -esto no lo sabe nadie- las "fichas" policiales que algunos de los nombrados en las comisiones tenían registradas en Zamora...). 


Foto José. Al fondo la nave de "David" Diciembre 2012.

Foto José. Hay cuervos y cuervos, estos son inofensivos, entre otras cosas porque no son cuervos, son grajos.


martes, 1 de enero de 2013

VII.- SALTÓ LA CHISPA

A lo lejos campos secos, yertos, viejos,
de ojos claros, apacibles y serenos.
Viejas tierras que abortaron sus maldades,
no más que alma, alma adusta, adormecida en agonía silenciosa.

Se apagaron los cantares en la rama de la encina
y aquella agua que bailaba entre cárcavas y barrancos 
se quedó colgada arriba,
en los nidos de la sierra.
Esas voces, voces viejas de la tierra, se acallaron,
sólo el canto de cigarra veraniega rompe el hilo de monótona existencia...
José Fuente, 1974.



Y UN DÍA SALTÓ LA CHISPA



Saltó la chispa porque se rumoreaba que los de Hacienda andaban detrás de los montes comunales del pueblo. Sería por el año 1976. El pueblo tenía la titularidad de los comunales y el Ayuntamiento era el administrador. Parece ser que habían transcurrido varios años sin pagar la contribución de esos montes, de manera que se había ido acumulando una deuda de más de 70.000 ptas. Los rumores arreciaban y decían de todo: - que si no se pagaba, Hacienda o ICONA se quedaba con todo; - se hablaba de ciertos especuladores de un banco en concreto que estaban al acecho para echarles el guante, si el pueblo no respondía.

Bueno, el hecho es que cundió la alarma y, ante la pasividad (algunos acusaban de complicidad) de las autoridades locales, tuvieron que ser los propios vecinos los que se organizaron y cargaron con el muerto. Algunos tomaron la iniciativa, expusieron la situación al pueblo, reunido en concejo, y se acordó repartir la deuda entre todos los vecinos que fueran propietarios de tierras. Los que habían tomado la iniciativa se movieron por las distintas zonas donde vivía la gente que había emigrado y consiguieron recaudar y llegar a tiempo (un día antes de que expirase el plazo) para "cumplir con Hacienda".

Y con esa chispa se encendió el fuego. Habían pasado unos años planos (de encefalograma plano), sin frío ni calor, los últimos 10 años (1965 - 1975, más o menos). En general no se tenía conciencia de lo que estaba pasando, bastante tenía cada cual con atender a sus cosas. Bastante tuvieron durante esos años con el ir y venir en busca del sustento. Ahora ya, una vez que cada uno había pisado tierra firme y ya había terminado de "colocarse", ahora que los sueños reposaban, llegó el momento de pensar y de echar la vista atrás. Y, de repente, se dieron cuenta de que atrás habían dejado un pueblo, una casa, una tierra abandonada... y espabilaron y empezaron a organizarse y a hacer cosas. 
Y lo que se hizo en el pueblo de Valleluengo en aquellos años (1974 - 1985 -aproximadamente-) merece ponerlo en letras mayúsculas, porque rompió la inercia y la apatía secular que anidaba en todos aquellos pueblos desde siempre y porque sirvió de modelo para otros pueblos de la zona.

El pueblo carecía de todos los servicios básicos: agua corriente y alcantarillado, alumbrado público, teléfono público, pavimentación de calles, asfaltado del camino de acceso (desde la carretera). (Por decirlo en román paladino o en castellano antiguo o hablando en plata, hay que decir que se seguía cagando en la cuadra o debajo de la tinada -con las gallinas como invitadas de honor- Las aguas sucias salían de las güeras que aparecían debajo de las puertas grandes y perfumaban el aire y el tollo de las calles...). Y, entonces, el pueblo se cabreó, dio el puñetazo debido encima de la mesa y arreó con todos los trastos. Se movió, se tiró al monte y reclamó lo que consideraba sus legítimos derechos. Conservo 13 actas de otras tantas reuniones de concejos o de las comisiones, que dan fe de la frenética actividad y del empeño que teníamos por conseguir lo que reclamábamos (actas que corresponden a los días 15/08/1979 - 22/08/1979 - 06/09/1979 - 12/10/1979 - 13/10/1979 - 14/10/1979 - 17/08/1980(concejo) - 17/08/1980(comisión) - 18/08/1980(concejo) - 19/08/1980 - 20/08/1980 - 03/09/1980 - 09/09/1980). A continuación transcribo la primera de esas actas, en la que se expone la situación real de entonces (es un fiel reflejo de aquella realidad) y las medidas que se tomaron:

"En Valleluengo, a 15 de agosto de 1979. Reunidos en concejo abierto, siendo las 11,30 h., los vecinos del pueblo, previamente citados, todos mayores de edad, propietarios de viviendas ubicadas en dicha localidad, tratan sobre los problemas que atañen al pueblo y que se relacionan con la falta de servicios públicos.
Se abre la sesión informando al pueblo del resultado de la entrevista que el pasado día 13 de agosto había mantenido una comisión del pueblo con el presidente de la Diputación. Dicha comisión estaba formada por: D.Máximo Mateos Llamas, alcalde presidente del Ayuntamiento; D. Santiago Pérez Pérez, secretario del Ayuntamiento; D. Bernardino Junquera, D. Ignacio Fuente, D. Ramiro Ferrero y D. José Fuente, como representantes del pueblo. La entrevista giró en torno a la problemática del pueblo respecto a la falta de servicios públicos. Se manifestó al Sr. Presidente el descontento y protesta del pueblo ante la Corporación Provincial, al no haber ni siquiera intentado poner remedio a los problemas que, desde hace tres años, se vienen planteando ante la Diputación. El Sr. Presidente no dio respuestas concretas. Se refirió al abastecimiento de aguas, diciendo que intentarían acogernos en alguno de los planes (Oeste - Campos - Base) que integraban los Planes Provinciales de este año. Prometió que el camino de acceso al pueblo podría pavimentarse a partir de enero.
El pueblo no quedó satisfecho...y como resultado se propuso tomar una serie de medidas concretas y más drásticas, con el fin de mover a la Diputación a que, de una vez por todas, hiciese caso a nuestras justas reivindicaciones. En ese sentido hubo varias propuestas de acción: - 1 Manifestación en Rionegro, haciendo entrega en el Ayuntamiento de un escrito dirigido a la Diputación y otro al mismo Ayuntamiento. 2 Campaña de prensa y radio. 3 Sentada en el Ayuntamiento. 4 Corte de la carretera Benavente - Orense. Se aprobaron por mayoría las dos primeras propuestas.
El último punto planteado fue la propuesta de constitución de una comisión representativa del pueblo, integrada por vecinos que viven habitualmente en el pueblo y por personas que viven fuera. Esta comisión tendrá como objetivo gestionar todos los trámites referentes a las obras y servicios del pueblo. Se aprobó la propuesta y se nombraron por votación los miembros de esa comisión, formada por D. Ismael Alonso Vara (alcalde pedáneo), como presidente; José Fuente, como secretario y ambos como representantes de la gente que vivía en el pueblo; D. Bernardino Junquera, representante en la zona de Bilbao; Dª Ana María Gallego, en la zona de Vitoria/Guipúzcoa; D. Ismael Bernardo, zona de Valladolid....
Se levanta la sesión recordando a los presentes la necesidad de mantener la unidad de todos y animando a la participación en la manifestación..."


A lo largo de esos años - sobre todo, 1979 y 1980 - hubo un trasiego continuo de las respectivas comisiones que se nombraban en los concejos para dar la vara ante las autoridades (Ayuntamiento - Diputación - Gobierno Civil - Sede de la UCD -el partido de Suárez, que eran los que mandaban entonces y, a su vez, eran los que mangoneaban estos temas desde Zamora-). (La contestación que nos dio en una de las entrevistas el gobernador nos dejó de piedra. El era D. Joaquín Argote, un paisano gordo, muy gordo, mofletudo y tripudo. Nada más exponerle los motivos de la reunión nos echó encima un jarro de agua fría, nos despachó diciendo que en la alta Sanabria había pueblos en los que la gente tenía que acarrear el agua en burros desde varios kms y que eso mismo ocurría en el Africa Subsahariana y que, por tanto, él no entendía el motivo de la urgencia con la que nosotros reclamábamos su intervención. Después se siguió despachando a gusto y soltó prendas como ésta: "Mucho ojo con los especuladores de ideas, los que meten en la cabeza de esas pobres gentes de los pueblos sueños imposibles. Las cosas siempre llevan su cauce normal y no hay por qué provocar las soluciones usando la fuerza, las algaradas...esos que juegan a engatusar a los pueblos para que se levanten y protesten contra las autoridades legítimas y democráticas...esos son los que tendrán que reflexionar y ver qué es lo que están haciendo..." Nadie dijo nada, sólo el secretario abrió la boca: "Vuecencia tiene razón, nosotros estaremos a lo que se nos mande..." (literal).)

LA MANIFESTACIÓN



Fue una demostración de fuerza y de unidad (de unidad relativa, porque siempre los habrá -y siempre serán los mismos - los que lleven el oficio de poner las chinitas en los pies...Yo no digo nada, vaya por delante mi máximo respeto hacia todos). Allí estaban la mayoría de los hombres y mujeres, viejos, jóvenes y menos jóvenes. A las 8 de la tarde de un día de agosto del año 1979. Algo inaudito, lo nunca visto en la comarca (y los medios de comunicación dijeron que tampoco en la provincia). La gente de Rionegro "achismaban" curiosos y sorprendidos tras la puerta y pegaban el portazo ante la avalancha de las voces "no nos mires, únete". Nos esperaba la policía de tráfico, que nos acompañó a lo largo del tramo de carretera hasta la plaza frente al santuario. Ahí se leyó el escrito de reclamaciones que se entregaría al Ayuntamiento para que lo enviase a la Diputación. Nos dirigimos al Ayuntamiento para hacer entrega al señor alcalde de ese escrito. Alguien trepó hasta el balcón y extendió sobre él una de las pancartas: "Pedimos justicia, los mismos derechos, los mismos servicios".
Y fue una demostración de compromiso y de comportamiento ciudadano (se habían pedido los permisos necesarios y alguien nos había informado que en el cruce del Empalme había una docena de jeeps de la guardia civil a la espera...). Allí estaban unidos como una piña la inmensa mayoría de los hombres y mujeres del pueblo, (la mayoría arrancaron andando desde el pueblo, todos juntos). Eran viejos y jóvenes, los padres y los hijos. Eran personas que habían forjado su carácter inconformista sobre los yunques insolentes e insensibles de las fábricas, con la voluntad curtida y tostada al retesteiro del sol que azotaba los tejados de los edificios en construcción, fajados en la disciplina implacable que marcaba el despertador cada mañana y en los ritmos trepidantes, monótonos y fríos de la cadena de montaje. Así que, no se la iban a dar con queso.

En Zamora se lo tomaron medio en broma, pensaron que sería una tormenta pasajera de verano. Pero se la tuvieron que envainar, porque la cosa se mantuvo y después vendría el agua y otras reivindicaciones y otras iniciativas como el bar o el coto o la concentración...Pero, vamos a ir poco a poco. Para otro día más.

lunes, 31 de diciembre de 2012

...Y PRÓSPERO AÑO NUEVO

Felicitación a la entrada del pueblo (en el Fornico)


Con el deseo sincero de que este año nos salga bien a todos/as. Nos conformamos con poco. Estamos acostumbrados a la austeridad, al frío, al calor y al chaparrón, como si nos caen chuzos de punta (Dicho con los versos del poeta extremeño, Luis Chamizo: "...Porque semos asina, semos pardos / del coló de la tierra..."/ /"...Quiero un hombre, quiero un hombre d´estos hombres / ya curtíos por el frío del invierno, / y tostaos por el sol del meyodía, / y bañaos po las aguas de febrero, / y besaos po la luna cuando duermen / en las eras, junt´al trillo, cara´l cielo..."

Bien, pues con permiso del poeta, nosotros también semos asina: gentes curtidas en la austeridad y en el sacrificio. Así que no venga nadie, que no se le ocurra ahora a nadie  hacernos la puñeta y rompernos en pedazos la luna de los sueños y nos acuse de vagos y maleantes o que nos diga a la cara - sin que se le caiga la cara de vergüenza -   que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, que hemos sido unos despilfarradores, (¿quién, yo...?, ¡amos, hombre...!) y que, por lo tanto, sólo nos merecemos el carbón como aguinaldo... y, después del carbón, resignación y comprensión, dar las gracias a los dioses del Olimpo y a seguir siendo buenos, felices y honrados.

En definitiva, que el deseo es firme y verdadero, pues quiero para todos un año enjundioso y lleno de contenido. La austeridad no tiene por qué estar reñida con las cosas buenas y jugosas de la tierra. (Eso que veis no son meros recuerdos evanescentes, son imágenes reales y palpables -IMÁGENES QUE REZUMAN LA "AUSTERIDAD Y LA RENUNCIA" A LOS PLACERES de estos días -  Es Valleluengo en estado puro... Lo siento por algunos, que les veo ya con la compuerta o el vagual de la poza saliviar abierta de par en par. No os privéis... estáis invitados, pasad, que la puerta está abierta (¡hombre!, así no, entrad de uno en uno...). ¡Va por ustedes!)

¡Y qué misterios insondables guardará celoso el puchero...!
Plato de jijos

Nada de brindis al sol

viernes, 21 de diciembre de 2012

VI.- Y LA EMIGRACIÓN TUVO SUS CONSECUENCIAS



Castilla se nos muere

Foto José. "Jubo de las vacas" (yugo)
No sé cómo decirlo. Mirad
esos febles campos
famélicos de soledad y tristeza,
esas gentes huídas en desvandada
con el corazón ungido de destierros,
ese infinito abandono, donde agoniza
un silencio primitivo.
Castilla se nos muere. Da vergüenza
comprobarlo. Pero hay verdades
que aún tienen vuelta de hoja.
Apremiad, castellanos, dotad
de vida humana a este paisaje con grilletes,
que espera vuestra salvación.

                                                                                     Ignacio Sanz (1978)


ME REFIERO A VALLELUENGO

Los que emigraron entre los años 1960 y 1975 fueron, sobre todo, hombres y jóvenes de ambos sexos. Fue una emigración que se produjo de estampida, en un período relativamente corto. Parecería como si de golpe a todos les hubiera dado la ventolera.  Los datos cantan: (En 1960 había - según mis cálculos - 55 casas abiertas (habitadas) y el número de habitantes rondaba los 300. En el año 1975 las casas abiertas se quedaron en torno a 20 y con 58 habitantes. Ahora hay 4 casas habitadas y 11 personas viviendo en el pueblo). Naturalmente, un hecho de esa naturaleza no puede resultar indiferente, tiene sus consecuencias.
1º.- Faltan los hombres. ¿Quién se hará cargo de las tareas de la casa?
Foto José. "El pote" (la olla express de entonces)
Foto José. "Fuente de la iglesia y pozas de lavar"
-  LA MUJER. Sobre ella recaerá el peso de esa carga. Desde septiembre hasta la siega de la hierba allí estaba ella, como una campeona, dale que te dale a todo lo que hubiera menester. Y cuando digo todo, quiero decir que se ocupaba de todos y cada uno de los trabajos que en aquellos años se realizaban a lo largo de los meses. Había tareas que hoy en día nos es difícil entender cómo podrían ser capaces de sacarlas adelante (cortar la leña - arar - llevar el abono a las tierras - sembrar). Eran mujeres cargadas de hijos, a los que deben atender (lavar la ropa en las pozas - acarrear el agua de la fuente - echarles la reprimenda o algo más, si se terciaba, "...que me tenéis hasta las mismísimas narices y no aguanto más..."); está la hacienda (vacas - ovejas...), que algunos días les tocará ir de pastoras o de pregueras (pastoras de las vacas), además de procurarles el sustento debido cada día (despachar la hacienda). Las pobres mujeres no tenían ni un momento de respiro (yo las recuerdo haciendo varias cosas a la vez: rezaban el rosario con todos los rapacicos acurrucados alrededor de la lumbre y ella aprovechaba el tiempo para  remendar  la culera de algún pantalón, mientras atendía también al pote en el que hervían las patatas de la cena).
Eran mujeres fuertes. Creo que se merecen el reconocimiento y la admiración de todos. En su recuerdo se me ocurren estos versos:


Esas manos, mujer,
esas manos,
esas uñas y esos dedos
como varas de sarmientos.

Foto: "La vida rural en la España 
del siglo XX" José Sánchez Jiménez..
 1975
Hoy con las ovejas,
mañana las vacas,
agucé las rejas
y avié la casa.

Lavar en la poza,
despachar la hacienda,
remiendo la ropa,
¡Señor, qué paciencia!

He ido a por nabos,
y a cortar la leña.
Mírame estas manos,
llagadas de penas.

A vimar el trigo
y a ralbar barbecho.
Todo lo que digo,
todo, yo lo he hecho.

Esas manos, mujer,
esas manos,
esas uñas y esos dedos
como varas de sarmientos.

Manos que acarician,
y manos que besan,
manos como brisas,
mujer, ¡qué belleza!

2º.- Se van los jóvenes.- El 90 % de los que emigran de Castilla y León en el período indicado tenían menos de 40 años y el 50 % menos de 30 (Ramiro García Fernández. "Tres décadas de desarrollo desigual en la economía de Castilla y León".) Si se va la savia, el árbol se seca. Es la primera consecuencia: el envejecimiento de la población. A partir de ahí, estas tierras quedarán mermadas de iniciativas, de la sana y necesaria rebeldía de la gente joven. Una tierra hundida en la cuna de la sumisión y de la santa resignación.
Foto José. "Calzada, frente a la iglesia".
Valleluengo sin los mozos y las mozas ya no fue lo mismo. Se apagaron los bullicios de las fiestas, los bailes en la calzada, (al son del tamboril de Salvador y de Quico... "la Venta el Empalme - la Venta el Empalme..."), las jotas, los carnavales, la hoguera de los Santos, el ramo de guindas que el mozo enamorado colocaba en la reja de la ventana de su moza amada la noche de San Pedro... O sea, que las costumbres y las tradiciones del pueblo se fueron perdiendo por falta de cultivo.
Foto José. "Boda en Valleluengo". 20012.
Otra consecuencia la encontramos en los emparejamientos. En el año 1960 el número de matrimonios en los que uno de los cónyuges venía de fuera, (procedía de alguno de los pueblos de los alrededores), no llegaba al 15 % (y de los 9 matrimonios que he contado sólo en uno es la mujer la que viene de otro pueblo, en los demás las que arrastran a los hombres al pueblo son ellas - ¡qué fuerza de arrastre o de "convicción"!... bueno, ahora tampoco han cambiado tanto las cosas..¿o sí?). Ahora ese porcentaje ha aumentado hasta el 96 %, (o sea, que apenas hay un 4 % de parejas en las que los dos han nacido o son descendientes directos del pueblo) con el añadido de que, además de los pueblos de la contorna, tenemos representación de cada una de las regiones de España y parte del extranjero. Así que, por mor de la emigración, Valleluengo ha entrado con todos los honores en la lista de los "ciudadanos del mundo". Hemos roto las fronteras.
Foto José. "Barril de vino, forrado con mimbre"
3º.- Los veranos. De vacaciones.- Aquellos veranos largos y duros se suavizan porque llegan los hombres o porque llegan los hijos y se agradece la ayuda. Se agradece y se celebra también su presencia, después de tanto tiempo sin verles. Llegan igual que se fueron, todos juntos, en tropel. Con otras caras, más gordos, más blancos y más limpios y todo eso es señal de buena salud, ("...hombre, dónde va a dar, si este rapá cuando salió del pueblo era un cuitadico, esmirriadico del todo, y míralo ahora cómo ha espurrido el condenao, si parece otro..."). Llegaban por la noche, a las tantas, cuando llegaba la Vergaresa a Rionegro (algunas mujeres dirán la Burgalesa y habrá también algún listillo - tiene que haber de todo - que la llaman la Vergatiesa). Para algunos, llegar de noche, le pudo jugar una mala pasada, (le ocurrió a Horacio, el del ti Hilario. Subía cargado con la maleta por la Veiga arriba - por no pasar al lado del cementerio - En la trilla de Amador alguien estaba durmiendo al cuidado del muelo de grano. Horacio, por hacer una broma, se acercó y cogió por un pie a uno de los que velaban la era. En mala hora lo hizo, porque Antonio, que estaba con un ojo cerrado y con el otro alerta, se levantó como un torbellino, cogió lo primero que tuvo a mano, que fue la tornadera de dar la vuelta a la trilla y salió escopetado detrás de él, dispuesto a todo..."Antonio, Antonio, coño...que soy Horacio, pero no...").
Parece que no, pero se notaba el cambio. Los veranos empezaron a ser distintos. Los domingos tenían otro aire, incluso se notaba ya el mismo sábado por la noche ("sábado, sabadete..."... No, hombre, me refiero a lo de la corbata y la camisa blanca, sólo a eso...). Olía la iglesia a varón dandy a la hora de la misa y seguía la hora del vermut con un chorrín de ginebra en los bares de Rionegro. Las tardes con los partidos de fútbol en los campos improvisados de la Veiga Redonda o en el Camino Viejo o al amparo del roble de Retaduña, dentro ya de las liguillas o campeonatos interpueblos (entre los pueblos más cercanos, pero también nos atrevíamos con todos aquellos que tuvieran a bien retar al equipo de Valleluengo que - dicen - arrasa allá por donde va. El pueblo más lejano fue San Pedro de Ceque).

Después llegarán las fiestas, las movilizaciones o las movidas, las iniciativas puestas en marcha, los palos y las zanahorias, los éxitos y los fracasos. Iré, paso a paso, poniendo a remojo la memoria de lo que aconteció durante esos años.
 "Equipo de fútbol. Foto expuesta en la cocina del bar C.P.U."


viernes, 14 de diciembre de 2012

V.- LA EMIGRACION INTERIOR





Foto "Memoria Gráfica de la Emigración Española".
Secretaría de Estado de Inmigración y Emigración.



Y ahora me voy.
Y me voy sin haber recibido mi legado,
sin haber habitado mi casa,
sin haber cultivado mi huerto,
sin haber sentido el beso de la siembra y de la luz...

León Felipe (nuestro gran poeta, nacido en Tábara)




SITUACIÓN EN ESPAÑA (1960 - 1975)


Finalizado el período de autarquía, España se va abriendo al exterior. Se abre un horizonte nuevo. Llegan los famosos Planes de Desarrollo de la mano de los ministros tecnócratas del OPUS DEI. Son los prometedores años del Seat 600. 
A partir de 1960 la política económica del gobierno se centró en el impulso de la industria, dejando de lado la agricultura, que entra en una profunda crisis. El INI (Instituto Nacional de Industria) fue uno de los instrumentos que el gobierno utilizó para el desarrollo de su política industrial y esa política quedaba reducida y concentrada sobre las áreas que ocupaban los vértices del triángulo Madrid - Cataluña - País Vasco. El resto de España se quedó con el culo al aire. Más adelante hubo el intento de corregir los desequilibrios regionales y se crearon los llamados Polos de Desarrollo (impulso de la industria en determinadas ciudades, en el caso de Castilla y León, en Valladolid). 

Una vez más el gobierno va de la mano de los intereses de las oligarquías, de quienes manejan los hilos del capital y que no dudan en concentrar la producción industrial en aquellas zonas que le resulten más rentables a ellos, sin tener en cuenta para nada los intereses generales del país (Hay una constante en el hecho migratorio y es que los que emigran son siempre las personas sin recursos, la clase adinerada no emigra, pero sí emigran sus capitales y lo harán hacia los mercados en los que obtengan mayores beneficios. Los ricos de Castilla, de Extremadura o de Andalucía - no importa de dónde - en qué regiones creéis que invertían sus dineros, ¿en sus regiones de origen para que éstas no perdieran el tren de la historia?). Ese juego de intereses conduce al auge desarrollista de unas pocas regiones, al tiempo que margina y provoca el hundimiento del resto del Estado, creando un desequilibrio regional de dimensiones imprevisibles en aquellos momentos.

Foto de U.C.Z (Unión de Campesinos Zamoranos), nº 10,
noviembre 1983.
Como consecuencia de todo ello  se produce una salida masiva de mano de obra del campo a las grandes ciudades (éxodo rural), de las regiones agrícolas a las regiones industriales (de las regiones empobrecidas, porque se desangran, volcando sus recursos hacia las regiones enriquecidas).

CASO DE CASTILLA Y LEÓN


Foto-composición (José Fuente).
"La emigración en Castilla y León"

Castilla y León ha sido una de las regiones más perjudicadas. Después de Andalucía y de Galicia ha sido la región que más población ha perdido a causa de la emigración, nada menos que 670.000 personas durante los años arriba citados. De las 9 provincias que forman parte de esta Comunidad, la peor parada ha sido Zamora, que pasó de un censo de 315.885 habitantes en el año 1950 a 227.773 en 1981 y a 198.000 en 2006. (En la década 1951 - 1960 emigran 46.119 y entre 1961 y 1970 lo hacen 76.995, lo que supone una pérdida de 123.114 personas. Una hemorragia de consecuencias irreparables).(Angel San Juan Marcel. "Prospectiva sociológica de los emigrantes zamoranos a países de Centro Europa")


VALLELUENGO



Foto José. "Hoces y guadaño"
Los primeros del pueblo que emigran hacia zonas del interior de España lo hacen en torno al año 1930. Van a Andalucía, unos dicen que a hacer carbón de leña y otros que a recoger caña de azúcar en el valle del Guadalquivir. El viaje lo tendrán que hacer a pie ("...llevaban colgando del hombro un par o dos de zapatillas de esparto, porque las que llevaban puestas se les gastaban..."). Me han hablado del ti Antonio Ferrero y también del ti Manuel Charro (informa Modesto Ferrero). No tengo noticias de nadie más, pero estoy seguro de que tiene que haber más hombres que hicieron la misma ruta. 
A mediados de los años 50 muchos van a trabajar al País Vasco. Trabajan en la construcción. Están allí desde septiembre (una vez recogida la cosecha) hasta la siega de la hierba (junio). Esa emigración temporal se mantiene hasta comienzos de los años 70, más o menos. Una vez que los hijos van arribando y una vez, también, que se han dado cuenta de que un "sobre" del mes (el jornal) vale tanto como toda la cosecha junta, entonces arrancan definitivamente, venden lo que tienen en el pueblo (la pareja de vacas, el tagayico de ovejas, las gallinas y el burro) y se instalan de manera permanente allí donde está el trabajo.


Foto José. "Cerandas",  en casa de Juan el de Julián.
Los hay que irán a trabajar a Francia, después de haber pasado por esa emigración temporal ("...en Oñate me pagaban a 12 ptas. la hora y en Francia ganaba 2 francos -1 franco=14,5 ptas-" - comenta Manolo Charro). Luego, casi todos los que se han ido al extranjero volverán y se asentarán de manera definitiva en el País Vasco o en Valladolid, allí donde han invertido parte de sus ahorros para comprar el piso. Algunos, incluso, tienen la oportunidad de montar su propio negocio: una tienda, un bar...

Los que han emigrado al País Vasco están  localizados en unas pocas ciudades: (la mayoría ha seguido los vínculos familiares y, en general, encontramos a hermanos, primos, etc. en la misma ciudad o zona) Vizcaya (Basauri - Bilbao - Baracaldo - Sestao - Portugalete - Santurce - Ermua), Guipúzcoa (Eibar - Oñate - Mondragón), Alava (Vitoria - Llodio).
El mismo criterio siguen los que se fueron a Valladolid y, unos años más tarde, algunas familias que lo hicieron a Madrid, León o Zamora. (Bueno, hay algunos que lo hicieron a Palencia, ¡qué le vamos a hacer!). Hay familias que, por razones de deslocalización de la empresa se han trasladado a otras ciudades: Tudela (Navarra). Tenemos también gente desperdigada por otros puntos del mapa y que nos representan como auténticos embajadores del pueblo. Algunos que recuerdo: Vigo, O Barco de Valdeorras, Barcelona, Canarias, Málaga(¿?)... Mallorca.


Foto José. "Chimenea apagada"
“Y al cabo de muchos años
estaban de vuelta en su tierra de origen
y nunca habían olvidado nada.
Ni al irse ni al estar ni al volver:
Nunca habían olvidado nada.
Y ahora tenían dos memorias
Y tenían dos patrias”

Eduardo Galeano


miércoles, 5 de diciembre de 2012

IV. VALLELUENGO EN LA EMIGRACIÓN. LOS QUE SE FUERON A EUROPA







SITUACIÓN EN ESPAÑA

Los años que sucedieron a la guerra civil fueron años de hambre y de calamidad. La política económica que impuso el gobierno no solucionó la situación, sino que la agravó aún más. Franco impuso la autarquía (autoabastecimiento, viviendo aislado del resto de los países y contando tan sólo con los recursos que se producían dentro de las fronteras de España). La escasez lógica de los recursos obligó al racionamiento y eso trajo como consecuencia la picaresca del contrabando y del estraperlo (mercado negro).

Cartilla de racionamiento
Desde agosto de 1939 se implanta el racionamiento a los garbanzos, el pan, las patatas (boniatos), pasta para sopas, bacalao y jabón. 150 ó 200 gramos de pan y cantidades parecidas para el resto de los alimentos. Los llamados “de abastos”  (comisión nombrada a dedo por el alcalde) eran los encargados de controlar, tanto la recogida de los productos en los pueblos como del reparto racionado por los mercados. Los precios eran desorbitados, de manera que había un sector amplio de la población que no podía comprar esos productos (ver tabla)

PRODUCTO
PRECIO
ESTRAPERLO (MERCADO NEGRO)
Aceite de soja
11,40 ptas/litro
30 ptras/litro
Jabón
6,5      ptas/kg

Azúcar
9,5            “      
20 ptas/kg
Sopa
7,5            “

Azrroz
4,5            “

Alubias
6,00          “

Pan (negro, de centeno)
0,50 ptas/100 gramos
Hasta 7 ptas
Pan (de trigo)

Hasta 25 ptas
Ternera (muy difícil de encontrar)
6,28 ptas/kg

Café (difícil de encontrar)
11,38 ptas/kg

DATOS: Boletín Oficial de la provincia de León, septiembre 1951.
 (de gregoriofernandezcastañon.com/cartilla.html).

Naturalmente, estos precios no se compadecían con los salarios (de miseria)(ver tabla)


OFICIO
SALARIO
Agricultor
5,50 ptas/día. (11 ptas/día en la siega)
Albañil
1,55 ptas/hora
Peón de albañil
1,00 ptas/hora
Obreros especializados (hombres)
10 – 12 ptas/día
Obreros especializados (mujeres)
6 – 7 ptas/día
Obreros no especializados
5 – 6 ptas/día
Aprendices
2 – 3 ptas/dia

La escasez de alimentos, el hambre y las enfermedades, como la tuberculosis o la hepatitis, se extendieron por todo el país como una plaga bíblica y se cebaron, sobre todo en los más desfavorecidos (los más pobres y los represaliados).

El 1 de abril de 1952 se suprimió el racionamiento. Después llegan los acuerdos con los EE.UU. (bases americanas), con el Vaticano, ingreso en la ONU y, poco a poco se van abriendo las fronteras y la importación de productos. En 1959 se pone en marcha el llamado Plan de Estabilización, con cambios tímidos, que irán dando paso al desarrollo de la España de los años 60 (Planes de Desarrollo, crecimiento de la industria, etc.).


EN VALLELUENGO

Valleluengo – lo he repetido muchas veces – tenía una economía de subsistencia (producía algo de todo lo necesario para sobrevivir, para ir tirando). Las necesidades fueron menores que en la ciudad, pero no se libró, como el resto de los pueblos, del control, del racionamiento y de los abusos. (En cada casa había una cartilla como la de la foto anterior). ("...dieron en escasear los alimentos y toda clase de artículos, procediendo muchos de ellos a su racionamiento, interviniendo la Fiscalía de tasas y exigiendo cupos forzosos de trigo, patatas, carnes... Para entregar el cupo de carne el pueblo tuvo que comprar vacas, engordarlas y luego entregarlas") - Bernardino Junquera. “del descubrimiento…al olvido”
Los años peores se corresponden con la época de sequía 1946-1949, que asoló los campos de toda España. La cosecha de 1951 fue de las mejores y dio un respiro. A finales de los años 50 hay como una pequeña borrachera de optimismo, porque parece que la situación se despeja y el temporal va pasando. Los vocingleros del Régimen anuncian cambios y promesas de todos los calibres: que se va a construir una presa en el Retorno, que llegará el agua hasta la punta arriba de Valdiguicia y que eso va a suponer la puesta en marcha de regadíos y que vamos a ser ricos aquí en el pueblo, sin necesidad de emigrar. Que van a poner una fábrica de coches en Zamora y ya verás como… (eran los anuncios de la FASA, que pasó a Valladolid…). No obstante, hay unos pequeños cambios: 1.- Paso del candil de petróleo a la luz eléctrica (costó 2000 ptas cada enganche, una cantidad que no todos podían pagar entonces). 2.- Reconstrucción de la fuente y lavaderos de la iglesia (Para la inauguración vino el mismísimo gobernador civil de Zamora. A la entrada del pueblo – junto al huerto del Fornico – todo el mundo lució sus mejores galas para darle la bienvenida. Pasó el gobernador bajo un arco de triunfo, que se había colocado al efecto, hecho con ramas de fresno. La maestra nos mantuvo formados y firmes a los rapaces, con banderitas, cantando "henchidos de fervor patrio" los “cara al sol” y “prietas las filas”.
Sigue Bernardino: “Ya antes de la guerra se había ampliado el cementerio y es en torno a los sesenta cuando se amplía la iglesia, se hace una nueva escuela, se pone la luz eléctrica, se hace el camino vecinal, se intenta mejorar el riego haciendo un nuevo pozo en el Carbayón…”

Uno de los hechos que mejor explica la situación que se vivía fueron las ayudas en alimentos que se recibían del exterior de España (la mayoría de los EE.UU. - ¡ojo!, no eran desinteresadas, ahí estaban las bases militares - ...) A la escuela llegaron grandes bidones de leche en polvo, que los rapacicos tomábamos a la hora del recreo - cada uno íbamos a la escuela con aquella taza de porcelana - Comimos también aquel queso amarillo, que no había Dios que lo tragara y, mira tú por donde que yo ahora lo como con gusto.
(Una curiosidad: Este verano pude observar en la iglesia que los soportes o  respaldos sobre los que se apoyan las estampas o cuadros de las estaciones del via crucis, que están colgados de las paredes, son de cartón y ¿a qué no sabéis lo que está escrito en esos cartones? - Cheese (= queso) , butter (=mantequilla) - USA - Si juntamos las piezas, el puzzle nos cuadra: Por esos años se reformó la iglesia y se colocaron entonces esos cuadros. No me digáis que eso no es reciclar. Todo un ejemplo.)

SITUACIÓN EN EUROPA

En el año 1945 terminó la IIª Guerra Mundial. Los países que participaron en la guerra quedaron totalmente destruídos: los medios de producción, las infraestructuras, la población (mano de obra), etc. En el año 1947 se pone en marcha el llamado Plan Marshall (plan de ayuda de los EE.UU. para reconstruir la economía europea y prevenir de ese modo el avance del comunismo de Rusia). (España queda fuera de ese Plan, lo cual va a suponer un retraso considerable en su desarrollo económico respecto a los demás países europeos).
Por tanto, hará falta mucha mano de obra para llevar a cabo el desarrollo del Plan y esos países europeos la buscarán en los países ribereños del Mediterráneo (desde Portugal, España, Norte de Africa hasta Turquía). 
Resultado: el número de personas que emigran a esos países se sitúa entre los 15 y los 18 millones.

EL INSTITUTO ESPAÑOL DE EMIGRACIÓN (IEE)

Se crea en el año 1956 y se dedica a reclutar a todos aquellos que estén dispuestos a emigrar a esos países europeos. Actúa como intermediario y canaliza la oferta y la demanda de mano de obra. A la España de entonces le interesa sacar toda la gente que pueda fuera de España, porque esa era una manera suave de disminuir las cifras del paro y evitar los conflictos sociales.
Resultado: el número de españoles que emigran a esos países pasa de los 2 millones.

LOS QUE SALEN DE VALLELUENGO

Y hasta Valleluengo llegaron también las llamadas de Europa. Unos acudieron a través del IEE, otros esperaron a que los que ya estaban colocados les reclamaran y hubo alguno - muy pocos - que se arriesgó y lo hizo por su cuenta. Los que lo hacían a través del IEE, recibían una pequeña preparación y llegaban al país al que emigraban con un contrato de trabajo. (Dice Modesto Ferrero: "...con contrato de trabajo y previos cursillos de aprendizaje de mínimos en cuanto a idioma y normas de comportamiento. Los cursillos los realicé en Orense".)
Los que emigran a Europa, a diferencia con los que se fueron a Argentina, lo hacen con la intención de estar unos años, ahorrar lo que puedan y regresar de vuelta a España. Además, tienen la posibilidad de volver cada año de vacaciones. En contra tienen los problemas del idioma, cultura, clima, etc.

¿QUIENES EMIGRAN?





Foto "Memoria Gráfica de la Emigración Española". Secretaría de Estado de Inmigración y Emigración.


LOS QUE VAN A ALEMANIA
  • Año 1962.- Sixto, Victoriano, Ernesto (trabajan en la industria farmacéutica BAYER).
  • Año 1965.- Modesto, Rogelio Prieto, Ismael Bernardo (trabajan en la siderurgia y derivados AEG).
  • Felicísimo y Felicidad Ferrero, Manolo (hijo del ti Eusebio y de la ti Cesárea), Lola, Gregorio y Agustín (hijos del ti Aquilino y de la ti Cecilia).
(Informa: Modesto Ferrero)

LOS QUE VAN A BÉLGICA
  • Heliodoro y Abelardo Charro
LOS QUE SE VAN A FRANCIA

  Angelito me dice que su abuelo Diego y Ernesto fueron los primeros del pueblo que emigraron a Francia. No me indica el año.

  Las personas que cito a continuación dependen únicamente de mi memoria, por lo que habrá fallos. Lo siento, lo hago con la mejor intención.

  •  Aurelio - Lorenza y Elena (hijos de Isidoro y de Socorro), Serafín, Nazario y Angelín, Pedro, Eusebio, Gregorio Gallego, Marina, Ignacia, Manolo Charro, Amador, Manuel Gallego, Genoveva, Leonorita, Martín, Asunción, Manolita, Aurelio Toledo, Ismael Alonso, Manuel Navales, Valentín, Clementino, Constantino, Benedicto, Hortensia, Leonardo, Ricardo, Isaac, Primitivo.

(La mayoría han regresado a España, menos los que aparecen subrayados.)